El ministro de Justicia Ruiz-Gallardón alaba la actuación de los notarios como árbitros para resolver los conflictos en «un plazo de seis meses» y a un «coste razonable». Manuel Pizarro ofrece «todo» su apoyo y Jiménez de Parga reconoce que se «tardará» tiempo en «descongestionar» los juzgados y tribunales.
Expansion.com – 24/04/2012
El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, ha hecho este martes una defensa de la mediación y el arbitraje como vía alternativa para la resolución de conflictos y como instrumento para reducir la litigiosidad en los juzgados y tribunales. En concreto, ha elogiado la actuación de los notarios como árbitros para resolver los conflictos en «un plazo de seis meses» y a un «coste razonable».
En el acto de presentación de la Fundación Notarial Signum para la resolución alternativa de conflictos, el ministro ha puesto en valor la creación de la Corte de Arbitraje por parte del Colegio Notarial de Madrid. Este órgano exige «una formación jurídica» a los intermediarios «garantizada por su condición de notarios».
«Su eficacia radicaría en que, a través del arbitraje, y en un plazo de seis meses se podría solucionar con absoluta confidencialidad y a unos costes razonables una controversia que, en otros supuestos, podría durar años», ha argumentado.
El responsable de Justicia ha puesto de relieve también la mediación asentada en la imparcialidad, la confidencialidad, la voluntariedad de las partes y «la responsabilidad civil en la que se pudiera incurrir».
Ha situado al mediador como la «pieza esencial» de este sistema y ha precisado que no le es exigible tener «una titulación previa» –a diferencia del arbitraje–, cuyo contenido y alcance se regulará en un futuro. «La resolución alternativa de conflictos arrastra un déficit histórico», ha remachado.
A juicio de Ruiz-Gallardón, la resolución alternativa de conflictos constituye un rango propio de «sociedades liberales», en las que las controversias se solucionan de forma «sencilla» y dialogante. Según ha dicho, la Constitución atribuye la función jurisdiccional a los tribunales, pero no hay razón para no abordar «el problema de congestión» en los juzgados.
Momento de transición en la Justicia
El acto ha contado también con la participación del expresidente de Endesa y exdiputado del PP Manuel Pizarro, que ha puesto de relieve la preparación de los notarios para desarrollar estas facultades y la necesaria confianza para ganar en seguridad jurídica.
«La confianza es la palanca de futuro. Por supuesto, podéis contar con todo el apoyo donde yo esté», ha destacado Pizarro, que es académico de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación.
Por su parte, el expresidente del Tribunal Constitucional y actual presidente del Consejo Arbitral para el Alquiler de la Comunidad de Madrid, Manuel Jiménez de Parga, ha destacado que el arbitraje puede resolver el estado «quejoso»de «acumulación extraordinaria» de asuntos en los órganos judiciales.
Ha señalado que la Justicia vive «un momento de transición» desde una «vieja» Administración hacia una nueva «cultura» del arbitraje, al tiempo que ha destacado el esfuerzo del Gobierno en conseguir un ritmo «aceptable» en la Administración de Justicia. «Tardaremos en descongestionar los juzgados y tribunales», ha finalizado.
Posteriormente, el vicepresidente de la Cámara de Comercio e Industria de Madrid, José Miguel Guerrero, ha hecho hincapié en el valor que supone para el empresariado la mediación y el arbitraje para resolver sus controversias «domésticas e internacionales».
El Pleno del Congreso de los Diputados convalidó recientemente el decreto-ley de mediación en asuntos civiles y mercantiles. El texto será tramitado en la Cámara Baja como proyecto de ley, lo que permitirá la propuesta de enmiendas.